Desde Maullín al mundo. Alejandro lleva años mostrando y contando historias a través de sus imágenes.
Alejandro – como lo conocen todos – nació en Puerto Montt, hace 48 años, pero está radicado en la hermosa comuna de Maullín. Estudió su enseñanza básica allí y la enseñanza media en Puerto Montt.
“Desde pequeño dibujaba muy bien, pero después en enseñanza media comencé a jugar con una cámara de rollo 110 de mi mamá; que se la ocupaba a escondidas. Después descubrí una cámara de 35 mm abandonada de mi abuelo Víctor; una Voigthlander Vito y comencé a probar con rollos de 35 mm. y revelado en color en Puerto Montt a fines de los 80s. Fotografiaba los recreos, los carretes, la entretención, cumpleaños, las primeras fiestas adolescentes, etc.” recuerda Alejandro, quien asegura que desde aquel entonces la fotografía había llegado a su vida para quedarse.
Al finalizar la educación media, como todos; tuvo que enfrentar la decisión de lo que haría (o no) el resto de su vida: “Tomar una decisión de esta magnitud es compleja para casi todos a esa edad. ¡Es un quilombo!” relata Alejandro, quien tenía claro su obsesión por el trabajo y búsqueda con imágenes, formas y colores: “Artes Visuales en ese entonces lo encontraba muy poco concreto, por lo que me sugirieron y casi me rogaron que estudiara Arquitectura… pero mi porfía pudo más y me fui a Diseño Gráfico o Licenciatura en Comunicación Visual, en la ciudad de Temuco.”
Una vez finalizada la carrera, Alejandro ha vivido –en lo que el mismo define como 3 etapas bien marcadas – una fue entre 1999 y 2003 en donde aprendió a trabajar en equipo y de manera subordinada, con orden y tanto metodologías propias y las de otros. Luego, de 2003 a 2008 se volcó hacia el lado de la docencia en institutos y universidades en Puerto Montt; una época apasionante, entretenida y motivante y la tercera etapa; que abarca hasta el día de hoy y tiene que ver con trabajos auto gestionados e iniciativas a través de la postulación a fondos concursables como Fondart, FNDR 2% de cultura y otros: “Muchas iniciativas han visto la luz mediante esta forma de trabajar, algunas veces para otros, es decir como gestor cultural y otras veces como autor y ejecutor integral.”
A TRAVÉS DEL LENTE
Este artista, a través de su lente captura imágenes de toda índole, pero suscribe a la fotografía documental, pero más cerrada a la foto social o sociológica, a la foto prensa, a la foto reportaje.
Entre sus referentes se encuentran los clásicos de antaño: Henrry Cartier Bresson, Robert Cappa, Robert Frank. Los internacionales de hoy Sebastiao Salgado, Pete Souza. Y en cuanto a fotógrafos nacionales; admira a Sergio Larraín y Tomas Munita, del ámbito regional; Alex Vidal Brecas (Llanquihue), Coico Brown (Puerto Montt) y Fernando Lavoz (Osorno)
Para Alejandro, detrás de cada foto hay una historia: “Que es el contexto propio en el momento en que la hiciste (backstage o anécdota del momento del clic, el previo o el posterior quizás) y en foto documental DEBE haber una historia legible, entendible y digerible por y todos, al menos en su capa externa igual para todos, a diferencia de la fotografía artística que se mueve en plano de las sensaciones, la emoción y lo subjetivo y/o abstracto. En la foto documental lo ideal es que se pueda contar una historia entendible en cada imagen. Al menos yo intento canalizarlo, entenderlo y proyectarlo en mi trabajo de esa forma. He intentado explorar en foto más conceptual y compleja en su lectura e interpretación, pero siempre vuelvo a lo documental y más concreto.” Nos cuenta Gallardo, quien además agrega que, en su caso particular, lo que busca mostrar a través del lente de su cámara es “El cómo se vive en esta parte del país en la más amplia extensión de la palabra, retratando el paisaje cultural que tenemos; me gusta retratar lo que hace la gente en distintos ámbitos de lo cotidiano.”
Para Alejandro, para ser un buen fotógrafo “tiene que estar la necesidad obsesiva por contar algo, por ser un transmisor a través de la imagen fija, querer ser testigo” y además es importante buscar y aprender de composición, buscar detalles que pasan desapercibidos, pero están ahí desde siempre y re-descubrirlos con los ojos y después con la cámara.” En este sentido, para él, la cámara y sus características pasan a segundo plano: “Hoy por hoy cualquier celular posee cámara más que buenas para hacer foto de calle o foto documental; el tema es ´construir´ mentalmente buenas imágenes desde lo compositivo y desde el mensaje de fondo y después hacer el click”, argumenta.
Gallardo ha participado en numerosos proyectos fotográficos, como ser Collage A 60 años del Mar, Lo Cotidiano con Reflex, Fe Maullín, Animitas de Maullín, Grandes Carreras en Maullín, entre otras; además de proyectos editoriales muy destacables como las Casas Patrimoniales de Maullín, Maullín Tierra de Historia, entre otros. En su sitio web (www.alejandrogallardo.cl) pueden ser vistas en detalle.
Actualmente, trabaja en algunas series, como por ejemplo la serie de retratos de los Fiscales de Maullín, que es una institución que este mes de diciembre cumplió 400 años desde su fundación oficial, y la idea es poder luego transformarla en una pequeña publicación y exposición. También está en ejecución algo con las ventanas antiguas del casco urbano en formato fotográfico, planimétrico y maqueta a escala.
Alejandro es un fotógrafo consagrado en la zona, que está siempre en la búsqueda de nuevas historias que contar, imágenes que capturar y seguir colaborando de forma activa con el arte y la cultura en la región, tanto desde su rol de fotógrafo como de gestor cultural.
****Esta nota forma parte del proyecto «Reconociendo a los Artistas de la Región de Los Lagos» ejecutado por @revistayapuertovaras y financiado por el Ministerio de las Culturas, el Arte y el Patrimonio a través de la Seremía Regional.