El primer sábado de septiembre se celebra en nuestro país el mes del circo, destacando su impacto en la comunidad y en el desarrollo personal. Circo Frutillar, una iniciativa de Fundación Mustakis que cumple 10 años, es un referente en la Región de Los Lagos, promoviendo la inclusión y el crecimiento integral de jóvenes a través del arte circense. Durante su aniversario, tendrá distintas actividades abiertas al público en Frutillar.
Septiembre en Chile no solo marca la llegada de la primavera, sino también la celebración del mes del circo y el Día Nacional del Circo, que se conmemora el primer sábado de septiembre desde 2017. Pero además, se celebran los 10 años de Circo Frutillar, iniciativa público-privada creada en 2014 por Teatro del Lago junto a Fundación Mustakis y la Municipalidad de Frutillar, que hoy se ha consolidado como un referente en la Región de Los Lagos.
Desde sus inicios, Circo Frutillar busca contribuir a la formación y desarrollo integral de sus participantes a través del arte circense como disciplina que involucra en su quehacer el ámbito artístico, técnico y socioemocional, orientándose hacia niñas, niños y jóvenes entre 7
y 23 años de edad, sin conocimientos previos en la disciplina.
Fieles a la creencia de que la tradición circense desempeña un papel vital en la vida de las personas y en la construcción de comunidad gracias a una combinación única de arte, técnica y creatividad, para Circo Frutillar las actividades son un motor de inclusión y cohesión social, proporcionando un espacio donde personas de todas las edades y capacidades pueden expresarse, aprender y superar sus límites.
Además, según explica Domingo Errázuriz, Director Ejecutivo de Fundación Mustakis, “la estrecha relación con las diversas entidades locales y con la comunidad, en especial con las familias de los estudiantes, ha sido fundamental para el éxito del programa. Circo
Frutillar busca convertirse en una experiencia transformadora tanto para quienes participan de éste como para todos quienes de alguna forma se vinculan a él”. Esta conexión con la comunidad es esencial para garantizar que el arte circense siga siendo un motor de cambio
social, capaz de transormar no solo a los individuos, sino también a su entorno.
Actividades programadas para septiembre
“El circo es una disciplina integral que combina lo artístico, físico y emocional, impactando positivamente en la vida de los jóvenes al mejorar sus motivación personal y bienestar general. Además de promover la salud, el circo desarrolla la creatividad y la expresión
artística. En Circo Frutillar no hay barreras de participación, permitiendo que personas con diferentes capacidades físicas e intereses se desarrollen plenamente. Más allá de los físicos y socioemocionales, el circo fomenta habilidades sociales clave como el
trabajo en equipo, la comunicación y la empatía, esenciales para construir una mejor sociedad”, añade Domingo Errázuriz.