Texto por: Seba Schirmer L. – Ilustración: Kipper Art (Rafael Angulo) @kipper_art
Tras la mini polémica del nuevo logo de la municipalidad de Puerto Varas, estuve meditando sobre un concepto muy interesante que apareció en esa conversación: la identidad local. El volcán, la rosa y el lago son fácilmente los elementos que más asociamos con la ciudad, aunque solo la rosa es exclusiva de Puerto Varas, dado que todos los centros urbanos alrededor del lago comparten el volcán y el mismo lago. Ahora, por otro lado, curiosamente a pesar de la proliferación de las flores en el escudo de la ciudad, estas brillan por su ausencia. Tengo la impresión de que hace uno o dos decenios atrás había una mayor presencia de rosales. ¿Qué pasó con ellos? ¿Las obras de pavimentación y las intervenciones de las inmobiliarias y de gas simplemente los destrozaron? ¿La excesiva poda hace que no alcancen a florecer frondosamente? El calentamiento global tiene a los volcanes cada vez más secos, el mal tratamiento de aguas servidas y la falta de infraestructura moderna de aguas lluvias tiene el lago contaminado y ni siquiera podemos mantener nuestros humildes rosales. Gritamos por la falta de un símbolo abstracto de cosas que hemos olvidado negligentemente, como el huemul y el cóndor del escudo nacional. Al final la identidad es lo que llevamos con nosotros y atesoramos como parte de nuestra cultura. ¿Qué sacamos con proteger un dibujo si no cuidamos aquello que representa? ¿Dónde están nuestros rosales? Ocultos bajo cemento, mascarillas, el polvo que dejan los autos y basura de nuestra desidia.