Crónicas de un Puertovarino a Pie: Mayo 2021

Texto por: Seba Schirmer L. – Ilustración: Kipper Art (Rafael Angulo) @kipper_art

Fase 3 al fin, después de meses confinados y semiconfinados al fin podemos «disfrutar» de menos restricciones. Pero no seamos lesos y nos confiemos y actuemos como si todo estuviese normal. Hay que seguir cuidándose, evitando reunirse con gente presencialmente y carretear. Pero no vengo este mes a hablar de esto, sino de mi feliz pesadilla: los fondos concursables. Como contexto, el 2013 creamos nuestro emprendimiento junto a mi socio con la idea de prestar asesorías ambientales. El 2016 quisimos diferenciarnos e innovar, y creamos lo que se convertiría en nuestro bebe (con todas las cosas buenas y malas que trae un bebe). Partimos con el apoyo de Corfo y después Start-Up Chile, y desarrollamos nuestro servicio de inteligencia artificial. Este año decidimos dar otro paso y crear un servicio derivado, por lo que postulamos a otro fondo, adjudicándonoslo. Además, producto de la pandemia y la baja de ventas, postulamos a un fondo de Sercotec que también nos adjudicamos. Uds. pensaran «que bakan, te dan fondos para desarrollar tu negocio» y si, es bakan recibir fondos PERO la burocracia detrás es horrible, ni Kafka se imaginó algo tan cruel. Cosas tan ridículas como que no puedo usar los fondos para comprar un lápiz de $1, pero puedo arrendar un lápiz a $1.000. Si por algún motivo me sale más barato de lo presupuestado la compra de X cosa, usar esa diferencia en otra cosa demora un mes en aprobarse. Y rendir, ufff, entregar el certificado del certificado que coincida con el sello papal de una bula de Urbano II. Chile es un país burocrático y «amamos» cosas como notariar hasta al perro, y documentos que certifiquen documentos (tipo las DJ para el F22 en el SII). Por un lado intentamos ser modernos y eficientes, pero por el otro me piden un poder de mí mismo (representante de una persona jurídica) a mí mismo (persona natural). Gracias a la pandemia, cosas han podido modernizarse algo (por fin el Estado me acepta documentos con firma electrónica, AÑOS después de ser ley, y espero pronto reemplace notariar la firma) y esperemos que se mantenga la tendencia cuando nos «normalicemos».

PD: vacúnese si puede (y si hay vacunas), no sea idiota.