Paz Frias Canales nació en Santiago, es la penúltima de 9 hermanos y tiene 2 hijos, quienes son su principal motivación y cable a tierra.
En 2004 se tituló en Técnico en Programación en Aplicaciones Computacionales y a sus cortos 38 años ha sumado varias experiencias laborales. Trabajó en Walmart (en el área de abastecimiento y logística) por 8 años hasta que renunció y se animó a emprender.
En 2011 invirtió en Vending (máquinas expendedoras de servicio) que en primera instancia fueron sillones masajeadores en la ciudad de Punta Arenas en donde vivió 3 años. “Me fue muy bien en aquel entonces, fue una linda experiencia y la ciudad es aravillosa” comenta Paz.
Luego, se trasladó a Osorno en donde volvió a emprender; pero esta vez en otro rubro: las flores.
“Me instalé con un local comercial, pero la venta no me acompañó y terminé quebrando a los 8 meses” cuenta esta emprendedora que sabe de momentos dulces y no tanto.
TOUR POR EL SUR
«Entregué el local de las flores y continué con el negocio desde mi hogar. Entre mis clientes estaba el hotel Sonesta y particulares a quienes les vendía suscripciones de flores, decoraba eventos especiales, hacía ramos de novias, botoniere, corsage (pulseras de flores), etc” explica Paz, que tras quedar embarazada toma una pausa y sigue con su labor de florista de forma intermitente.
Pasó otro año también en Temuco y en 2015 llega a Puerto Varas, donde reside desde entonces.
“Volví al sur con mis hijos pequeños, mientras aceptaba mi fracaso personal y la frustración de ese negocio que por más que quisiera; en ese momento no podía seguir con aquello. Vendí todo lo relacionado con la florería virtual, que se llamaba Tulipaz y me cambié a una casa más pequeña a pensar en un negocio que me permitiera seguir criando a mis hijos y estando presente como mamá y a la vez, tener un ingreso de manera permanente.”
NACE PICHINTUN
Finalmente, en 2016 se lanza con su nuevo proyecto: Pichintun: “En aquel momento solo tenía muchas ganas de salir adelante, a mis hijos y un auto; que se convertía en una tremenda bendición” cuenta Paz.
Comenzó con máquinas dispensadoras de snack a granel: “Su nombre nace porque por medio de una moneda de $100 o $500 te puedes comer un poquito o un pichuntun de snack. Primero comencé con snack saludable en gimnasios, pero vendía muy poco y la mercadería perdía frescura por su lenta rotación. Luego fui a ofrecer el servicio a universidades, institutos profesionales y empresas. Eso me permitió tener más maquinas, más venta y estabilidad económica. Además, pude colocar un amplio surtido de confites y frutos secos” agrega Canales, quien siempre confió en sus capacidades.
Pero como a casi todos, la pandemia que azotó al mundo en marzo de este año también causó estragos en Pichintun: “Había invertido stock de mercancía para el negocio y no sabía que hacer porque las universidades e institutos cerraron, pero busqué la forma de salir de esta situación: inicié rápidamente las gestiones para contar con resolución sanitaria. En este nuevo comenzar, quería que Pichintun tuviese un atributo que lo hiciera distinto”
En mayo, ya con la resolución sanitaria aprobada, Paz comenzó a envasar sus productos y ofrecerlos en distintos locales, en donde se pueden encontrar al día de hoy como por ejemplo Amasandería Mariela (Arturo Prat 215), Chile Fresco (Mirador de Puerto Varas), Emporio La Grepa (camino Línea Vieja), Kiosko Subterráneo del Mall de Puerto Varas y Minimarket La Botellita en calle del Rosario.
La idea y propósito de Pichintun es que sea una venta justa y acercar los frutos secos, frutos deshidratados, semillas y confites a todas las personas: “Mi objetivo es que estos alimentos sean alcanzables para todos y más aún al que lo necesite consumir por temas de salud o simplemente disfrutarlos” cuenta Paz.
Vale destacar que inclusive los envases en los que se venden los productos llevan el gramaje apropiado y además son recipientes de papel kraft reciclado y biodegradable. Conservan a la perfección las propiedades de cada producto y los proveedores con los que trabaja Pichintun son Premium y de la mejor calidad (son productores, no comercializadores).
“Próximamente sacaré dos productos creados por Pichintun, que son dos tipos de mix de frutos secos con información nutricional” cuenta Paz, quien además este año comenzó a estudiar en el centro de formación técnica estatal de Llanquihue la carrera de “Técnico en Logística”.
UNA MUJER POWER
Paz ha sabido sobreponerse y sacar lo mejor de sí en cada paso: “Estoy en un proceso de siembra, que ha sido muy intenso y agotador, donde por temas personales, tengo que valerme por mi misma; como muchas mujeres lo hacen, donde no hay tiempo para la pausa, pero es muy gratificante ir viendo los resultados del esfuerzo y la perseverancia.”
Para finalizar, esta emprendedora tan power deja un mensaje alentador: “Solo quiero decirles a aquellas personas y sobre todo a las mujeres que se identifiquen con mi historia, que hablen, que conversen, que se conecten con lo que les guste desde la manera más básica que encuentren. Nunca abandonen sus sueños, por más pequeño que sea, trabájenlo, mejórenlo, pidan ayuda, busquen asesoría, y siempre valórense, quiéranse. Nunca permitan que otro menosprecie ese sueño. Luchen hasta el final, tengan la convicción de que tú puedes, cree en ti. Pase lo que pase, debes serte fiel a ti, no a tu pareja, ni a tus hijos, ni a tus amigos, si tu estas bien puedes darles estabilidad y amor a otros, y eso es lo más importante.”
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