Verena Baeza Jakob, fundadora: “Nuestro propósito en la Fundación Colibrí del Lago es dar un tratamiento digno e integral para lograr la inclusión social de todos nuestros pacientes”
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En Chile, 1 de cada 5 personas tiene algún tipo de discapacidad, y la mitad de estas se encuentra en vulnerabilidad social, según la Encuesta Nacional de Discapacidad elaborada por la Senadis. Por esta razón, Verena Beza Jakob (28), kinesióloga con especialización en neurorehabilitación, se motivó a buscar soluciones que tuvieran un propósito e impacto social y donde pudiera aportar desde su profesión. “Partí trabajando en 2017, cuando terminé la Universidad en Santiago. Ahí, buscando oportunidades laborales, fue cuando se me ocurrió crear un proyecto que apuntara a la neurorehabilitación de la sociedad más vulnerable. Trabajé en un jardín infantil de Renca, en un colegio ubicado en Gran Avenida y en una residencia de adultos mayores en Independencia. Yo repartía mis días de la semana y mis horas en estos establecimientos y las terapias eran financiadas por empresas. Los cambios eran sorprendentes, ya que muchos nunca habían tenido la oportunidad de acceder a terapia”, enfatizó Baeza.
A fines de 2019 decidió viajar al sur en busca de nuevos proyectos. Cuando llegó a la ciudad de Puerto Varas, Verena se dio cuenta de que era necesario también contar ahí con una fundación que pudiera apoyar a las personas con discapacidad. “Hay 345 personas en situación de discapacidad física y sensorial, en contexto de vulnerabilidad social, en la zona. Por eso, en enero de este año y con el apoyo inicial de mi familia, creé la Fundación Colibrí del Lago. Nuestro propósito es dar un tratamiento digno e integral a nuestros pacientes para lograr la inclusión social a través de terapias integrales personalizadas, con el fin de mejorar su calidad de vida y el desarrollo de sus capacidades”, indicó Verena.
Actualmente atienden a 11 pacientes y esperan poder seguir recibiendo a muchos más. Cuentan con seis donadores activos y están en tramitación para poder recibir aportes de empresas a través de RSE. “Para acceder a las terapias, los requisitos son: vivir en un radio de 50KM de Puerto Varas, pertenecer a un hogar que esté entre el 0% y el 40% de menor ingreso o mayor vulnerabilidad, poseer discapacidad de moderada a severa y que la familia participe en el proceso”, señaló la fundadora de la fundación.
Actualmente, la Fundación tiene alianzas con la Casa de la Discapacidad de Puerto Varas, la Teletón, la Municipalidad de Puerto Varas y Llanquihue, Chile Crece Contigo y la 1° Comisaría de Puerto Varas. “Estamos en constante búsqueda de apoyo. Hoy necesitamos espacios físicos para funcionar, contratar nuevos profesionales, material de trabajo para las terapias, transporte y por supuesto, nuevos aportes económicos”, enfatizó Verena.
Para conocer más de la fundación, apadrinar y hacer aportes, pueden visitar su página web www.fundacion-colibri.cl y su Instagram @fundacion.colibri.del.lago.