Un tiempo para agradecer

Por: Milagros Rojas – IG @prof.milagrosrojas

Llegamos al último mes del año, se termina el 2020. Diciembre era cotidianamente el mes de las fiestas, de las compras, de los intercambios de regalo y sobre todo de las reuniones familiares. Sin duda cada diciembre había sido siempre un mes muy agitado, emocionante y cargado de cosas por hacer, pero me pregunto: ¿cuánto espacio de nuestro tiempo nos hemos tomado para agradecer?

El agradecimiento al que me refiero va más allá del que se expresa frente a una situación placentera o a un favor recibido. Es el que se siente como una emoción que te lleva la mirada al cielo para soltar espontáneamente un ¡GRACIAS! No importa a qué o a quién lo dirijas, lo cierto es que esa acción pareciera nutrir de energía cada célula del cuerpo, logrando que las preocupaciones o penas que podamos llevar se vuelvan más livianas. ¿Lo has experimentado alguna vez?

Cuando un año está por culminar es común  hacer un balance entre lo alcanzado y lo que no y dejar propuestas o metas para el año venidero. A escasos días para terminar 2020 me senté a pensar en lo que había vivido durante este año y al hacer mi balance me di cuenta  que tengo mucho que agradecer.

Quizás pensarán que mi gratitud por un año como este tiene poco sentido, alegando que nos cerró todas las posibilidades de iniciar o continuar un proyecto, nos hizo perder el trabajo o inclusive nos alejó o se llevó a un ser querido. Nadie pone en duda que el 2020 vino a darnos un gran sacudón colectivo, pero si estás leyendo este artículo, definitivamente estás vivo o viva. El abrir los ojos cada mañana, respirar y seguramente estar más sanos que enfermos (porque siempre tenemos algo que nos puede aquejar), es el principal motivo para agradecer.

El «ticket de vida» que recibimos cada día es como una hoja en blanco y en ella podemos dibujar lo que deseemos. Sin embargo, algunas de estas hojas puede que no sean tan blancas, al presentarnos  situaciones distintas a las que esperábamos. Solo hay que aceptarlas y estar atentos para descubrir lo que vienen a enseñarnos.

Este año el cuaderno de la vida para la humanidad llegó con unas cuantas hojas  no tan blancas: la pandemia. Pero a pesar de lo negativo que nos puede significar consideré justo incluirla en mis agradecimientos y les voy a contar porqué.

Gracias a la pandemia comprendí que la vida es cada minuto: ayer ya no existe y mañana no ha llegado. Entendí que lo que proyecto para el futuro es simplemente un plan y es posible que pueda o no cumplirse. Consciente de eso, me dispongo siempre a hacer todo lo que esté a mi alcance para lograr lo planificado, pero sin olvidarme de vivir y disfrutar el presente conmigo y con las personas que amo.

Agradezco a esas hojas no tan blancas que hemos vivido desde hace algunos meses, porque me obligaron a tomarme el tiempo que nunca me había tomado para estar conmigo y reflexionar sobre el milagro de la naturaleza que somos. Cuando volvemos a nuestro ser reconociendo nuestra esencia, somos capaces de enfrentar cualquier adversidad y convertirla en oportunidades.

El confinamiento resaltó el valor de cada una de las personas que están en mi vida. Me permitió cultivar de nuevo relaciones familiares y de amigos que se estaban diluyendo por falta de atención y tiempo. Y aunque suene extraño y contradictorio, esta pandemia también me permitió conocer a otras, que llegaron para recordarme que incluso en las situaciones más complejas y desagradables, existe un motivo para agradecer.

La gratitud le da sentido a la vida y llena de paz el presente. Por eso para culminar este artículo te invito a que te conectes con lo que la vida te está presentando y lo observes con detenimiento, seguro que conseguirás mucho para agradecer.

AGRADECIMIENTO ESPECIAL:

A través de estas líneas quiero expresar un cálido agradecimiento a Priscila R. Witzke y a todo su equipo por haberme prestado un hermoso espacio en su Revista Ya! Puerto Varas, y por supuesto a todos sus lectores, quienes me han recibido tomándose un tiempo para leerme.

A todos… ¡Mil Gracias!

Les deseo que pasen un fin de año disfrutando en familia y que el 2021 venga colmado de mucha salud, bienestar y armonía para todos.